Skip to main content
Noticias

El Reportaje. El Repsol Honda Team en movimiento

El Repsol Honda Team en movimiento.
Desde Bélgica a Valencia, el Repsol Honda Team al descubierto.

Lunes al mediodía. Los tres camiones y los diez coches que componen el Repsol Honda Team salen de la base del equipo en Aalst, cerca de Bruselas, dirección Valencia, España. En los camiones viajan las motos, repuestos, motores y todo lo necesario para que los pilotos puedan salir a la pista incluso en caso de que se den varias colisiones. Con las motos de competición viajan, además, los seis scooters que se usarán dentro del paddock. Seis personas, dos por cada camión, son responsables de llevar estos sofisticados vehículos a su destino. Alex Briggs y Gary Coleman, ambos australianos y mecánicos de Valentino Rossi, se turnan para conducir el enorme trailer del piloto italiano.

En el camión de Nicky Hayden viajan Cedric Leprael y Peter Benson, francés y australiano respectivamente. Todos son veteranos en el equipo Honda, pero uno de los miembros más antiguos del equipo, con trece años en su haber y que ya coordinaba el Repsol Honda Team cuando corrían pilotos de la talla de Mick Doohan o Alex Crivillé, es Roger Van Der Borght. Este belga tranquilo y siempre eficiente, conduce el tercer camión del equipo, que contiene los repuestos y la zona destinada a oficinas durante los días que se pasan en el circuito. Le acompaña Takahiro Hosoda, uno de los mecánicos japoneses que trabajó con Ukawa y que ahora lo hace con Nicky Hayden.

Este año, ocho países están presentes en el Repsol Honda Team; en él trabajan once japoneses, nueve italianos, cinco australianos, dos neocelandeses, un francés, dos belgas, tres británicos y un finlandés. Una auténtica torre de Babel en la que, milagrosamente, todos se entienden. También el lunes, pero desde la ciudad italiana de Bologna, parten dos camiones más que se transformarán, una vez instalados en el circuito, en el hospitality del equipo, uno, y en un completo despacho y sala de reuniones rodante el otro. En este caso, un conductor basta para hacer llegar cada camión a su destino. Massimo Conti, italiano y jefe del hospitality, trabaja en el Mundial desde hace casi veinte años y conduce el camión de catering. Guido Giavazzi, también italiano y miembro del staff de catering, se ocupa del otro camión, y juntos llegan al circuito a tiempo para reunirse con los demás.

El fin de semana….

Antes de que los camiones, las motos o los miembros del equipo lleguen al circuito, lo hace la gasolina. Hasta la última gota ha tenido que pasar un estricto control en un laboratorio suizo antes de ser homologada y enviada al circuito para, posteriormente, pasar la inspección técnica previa a los entrenamientos y la carrera. Todos los equipos están obligados a pasar por el mismo proceso. Respecto a los repuestos para las motos del Repsol Honda Team, algunos llegan directamente de Japón o los llevan los miembros japoneses del equipo cuando van al circuito. Otros, se envían a Bélgica antes de la carrera. También están preparados, semanas antes del Gran Premio, todos los permisos y papeles necesarios para atravesar las distintas fronteras. Antes de la creación de la Unión Europea, este proceso era mucho más complicado y lento, los camiones tenían que parar en cada país para realizar los trámites necesarios, pero afortunadamente hoy eso ha cambiado.

En algunos países, como en la República Checa, no siempre es posible evitar que los camiones queden retenidos, a veces durante horas. Antes de que comience la temporada , los técnicos de IRTA (Internacional Racing Team Association) ya han pedido las dimensiones exactas de los camiones a cada equipo, y tres semanas antes de la llegada de los vehículos, se ha medido el espacio disponible centímetro a centímetro. Luego se diseña el paddock por ordenador, a fin de encontrar la mejor distribución del espacio. Cada año corren más equipos en el Mundial de Motociclismo, y los hospitalities y equipamientos son cada vez más grandes, mientras que el tamaño de los circuitos no varía sustancialmente; así que el trabajo de organizar el paddock se parece mucho a montar un enorme puzzle. Valga un ejemplo: cuando Jeff Dickson, uno de los cuatro paddock managers de IRTA,  se incorporó a su trabajo, en 1997, treinta equipos compartían el paddock.

Hoy son 128 los camiones que se reúnen en cada Gran Premio, y el total de vehículos que ocupan la zona anexa a los boxes asciende a 250 por carrera, en una superficie que ronda los 35.000 m2. Sin olvidar las zonas de aparcamiento, que acogerán los 2.000 coches de invitados y patrocinadores. Durante el fin de semana de una carrera, se toman desde el helicóptero unas cien fotos aéreas del circuito y sus alrededores, que ayudan más tarde a completar la información necesaria para organizar el paddock de ese trazado en concreto, la temporada siguiente. El martes previo a la prueba, los paddock manager dibujan marcas en el suelo para delimitar las zonas de aparcamiento. Aquí cada centímetro es importante: si un camión no está bien situado, tendrá que volver a efectuar la maniobra hasta quedar exactamente en el lugar que se la ha asignado. Y el miércoles, los técnicos de IRTA caminarán kilómetros a lo largo y ancho del paddock, asegurándose de que todo el mundo está en el lugar adecuado.

En cuanto a los boxes, nos comenta Jeff, en 1988, un box para la categoría equivalente a MotoGP, y con capacidad para dos motos, medía 8 x 4 metros. En los últimos diez años, estas medidas se han ido ampliando hasta alcanzar los 12 x 12 metros actuales. El miércoles por la mañana, a las ocho, se abren las puertas del circuito. Los primeros en entrar son los camiones y hospitalities de MotoGP; en dos horas todos deben estar ya en su lugar. Les siguen los camiones de 250 y 125cc. Los boxes se han asignado según la posición de cada equipo en el campeonato, y los camiones se aparcan en general justo delante. Primero se adjudican los boxes de MotoGP, luego los de 250cc y por último, los de 125cc. A la una del mediodía, todos los vehículos deben estar ya aparcados en el lugar designado. Cinco horas para organizar 250 vehículos, con espacios entre ellos que a veces no superan el metro de longitud. Cuando todo está listo, dos miembros del Repsol Honda Team empiezan a limpiar los camiones mientras los otros cuatro del equipo se encargan de poner a punto el box: hay que colocar la moqueta, los paneles…y todo deberá estar listo antes de la una de la tarde. Para entonces, ya habrá llegado el resto del equipo y se terminará de montar el box, que el jueves por la mañana tiene que estar listo para la inspección técnica.

Las cerca de quince personas que trabajan en el montaje (mecánicos y técnicos del equipo) tardan unas tres horas en sacar todo el material de las 55 cajas, el mismo tiempo que invierten en volver a guardarlo el domingo después de la carrera. Esa misma tarde se empezarán a reconstruir también las motos, que deben estar listas antes de la inspección técnica de jueves. Como el miércoles suele haber poco trabajo, por la noche hay bastante animación, así que al día siguiente, ¡prohibido hacer ruido por la mañana! El grueso del equipo llega al circuito el jueves a las 9 de la mañana y se empieza a trabajar en las motos, que siempre necesitan ajustes para esa carrera en concreto. Los técnicos de Dorna, la empresa que organiza el Mundial, instalan las cámaras que permitirán al público ver imágenes de la carrera en tiempo real y de muy, muy cerca.

Por la tarde tiene lugar la inspección técnica, que lleva a cabo la Dirección de Carrera. Cada moto tiene que cumplir una serie de normas que afectan a su peso, la gasolina, modificaciones, dimensiones… Todo es verificado dentro de cada box entre las diez de la mañana y las cinco de la tarde. Por fin llegan los entrenamientos y la carrera. Cada miembro del equipo sabe exactamente qué tiene que hacer, se coordinan entre ellos y todo es modificado y revisado mil veces, hasta que cada piloto se siente cómodo sobre su montura. Mientras, en el despacho, Roger recibe a través de una red conectada a Dorna los resultados de las sesiones y toda la información que los pilotos y mecánicos necesitan para llevar a cabo su trabajo. Esa información se hace llegar también a los técnicos en Japón, de forma que todo el mundo cuenta con la misma información en tiempo real.

Mientras, en el hospitality, Massimo Conti y su equipo se ocupan de que todo el mundo se alimente bien. No importa dónde se celebre la carrera, la excelente comida italiana del hospitality del Repsol Honda Team ayuda a que todo el equipo reponga energías. La dieta suele ser mediterránea, aunque este año se ha incorporado maquinaria especialmente pensada para preparar arroz y condimentos específicos de la dieta japonesa. Tampoco hay que olvidar el vino italiano, que ayuda a abrir el apetito…y algunas fronteras, como la de la República Checa, donde siempre es problemático pasar la aduana. La representación italiana al completo (Guido, Max, Oscar, Mario y Vittorio) se ocupa de alimentar a unas cien personas dos veces al día. En un fin de semana, pasan por los fogones quince kilos de pasta, ocho de carne y otros tantos de pescado, fruta y verdura a voluntad y todo tipo de productos italianos: jamón, queso, arroz…Todo para lograr el máximo rendimiento, no sólo de las motos.

El Domingo por la tarde, alrededor de las siete, se cargan otra vez los camiones y se dejan listos para salir esa misma noche o al día siguiente hacia Bélgica, a menos que la próxima carrera esté muy cerca, en cuyo caso el equipo se queda en el circuito reparando las motos. En muchos países, circular el domingo por la noche con el camión puede ser un verdadero problema. El año pasado, por ejemplo, y debido a restricciones en la circulación en el País Vasco, los camiones se vieron retenidos desde las diez de la mañana hasta medianoche. Catorce horas de retraso respecto al horario previsto. Desde los atentados del 11 de septiembre, además, el transporte de mercancías peligrosas se ha complicado mucho. Las motos, gasolina, baterías, aceite…necesitan un certificado especial y los motores tiene que ser lavados a conciencia para eliminar cualquier rastro de aceite. Si todo va bien, la pequeña caravana llega a su base el lunes… hasta la siguiente carrera.

¿Sabías que la gasolina que se utiliza en los Grandes Premios es enviada antes a un laboratorio en Suiza para su homologación?… son los mecánicos quienes conducen los camiones del equipo a través de Europa?… conseguir los permisos necesarios para transportar todo el material puede llevar meses?… el paddock se mide centímetro a centímetro y luego se diseña para lograr que quepan en él todos los camiones? A veces están separados entre sí por sólo unos centímetros… en cada carrera hay unos 250 vehículos en el paddock, que se aparcan en sólo cinco horas?

Leave a Reply