El Rally de Túnez ha llegado a Libia, parte central de la competición, y lo ha hecho con la especial más larga de las once programadas en total. Han sido 563 kilómetros cronometrados que han terminado en Oubari, donde los pilotos pasarán la noche sin las asistencias, puesto que la etapa de hoy es considerada maratón. Con un amplio margen en la clasificación general, Marc Coma ha decidido no arriesgar, administrar su ventaja y cuidar al máximo tanto la mecánica como sus neumáticos.
En este sentido, el piloto Repsol ha preferido montar una cámara de aire en su rueda trasera y así no correr riesgos que puedan acabar con sus aspiraciones en esta competición. Al final, después de más de seis horas al manillar de su KTM 690 Rally, Coma ha cedido cuatro minutos con Cyril Despres, aunque sigue liderando la carrera con otros cuatro minutos de margen. Para Jordi Viladoms, esta quinta etapa no ha sido tan positiva, y se visto relegado hasta la sexta plaza, al llegar con 22 minutos de diferencia respecto al mejor tiempo.
Mañana espera una etapa de 418 kilómetros, 308 de ellos cronometrados, en los que se enfrentarán a una jornada marcada íntegramente por la arena de Libia. Las dunas harán de la especial una difícil prueba física, y con tantos kilómetros a sus espaldas, la resistencia empezará a tomar su parte protagonismo.
