Nueve años después de proclamarse Campeón del Mundo de Esquí Alpino, el piloto francés vuelve a a ser el mejor, pero esta vez en el Rally Dakar.
Subcampeón en la pasada edición del Rally, Luc Alphand afrontaba este año su séptima participación en el Dakar y lo hacía con el firme propósito de ganar. Pero para ello debía destronar al mejor piloto de Rally-Raids de todos los tiempos, a la vez que su compañero en el equipo Repsol Mitsubishi Ralliart, Stéphane Peterhansel. Pasó a liderar la prueba tras la séptima etapa, pero errores en la navegación, bloqueos en la arena y un choque contra un árbol le llevaron a dar por buena la segunda posición. Pero el Dakar es imprevisible y el líder Peterhansel dio al traste con sus aspiraciones de revalidar el título al chocar también contra un árbol. Situado tras el líder desde la octava etapa, y con dos victorias de etapa en su haber, Alphand finalmente se ha proclamado vencedor del Lisboa Dakar 2006.
– País por país, ¿cómo ha sido tu paso por el Dakar?
‘Comenzar en Portugal fue una gran idea, porque es un país fantástico para el off road. Las dos etapas nos fueron muy bien, sobretodo la segunda en la que el terreno fue más montañoso. Luego llegamos a Marruecos, pero este año han sido etapas mucho más duras, más largas; los tres días en Marruecos fueron verdaderamente complicados. Cada día hacíamos más de 300 Km, había mucho polvo y un montón de motos a las que había que adelantar. Fue muy complicado coger el ritmo e ir deprisa un día por una cosa y otro por otra. Pero tuvimos una bonita lucha con los Volkswagen, con los Schlesser. Hasta que llegamos a Zouerat, estuvimos muy apretados, diez coches en diez minutos. Increíble para un rally como este. En Mauritania, Stéphane trató de rodar fuerte para marcar las diferencias y yo me esforcé en seguirle. Las dos etapas hasta Nouakchott fueron muy satisfactorias, porque establecimos un buen margen con respecto a los Volkswagen y la lucha con Stéphane era muy estrecha; hasta Kiffa sólo nos separaban 8 minutos. A partir de ahí todos nos daban ya como ganadores, pero todas la África negra fue bastante complicada. Cometí mi primer error grave de navegación y luego choqué contra un árbol, lo que me llevó a dar por perdida la victoria. Pero también Stéphane cometió un error, nosotros tomamos el liderato y trabajamos para mantenerlo hasta el final. Estoy muy feliz de haber alcanzado Dakar en la primera posición.’
– Para ti, ¿cuál ha sido el peor momento de esta edición?
‘Para nosotros, lo peor siempre son los accidentes. La muerte de Andy Caldecott fue dura. Los coches vamos por detrás de las motos y ese día pasamos por el lugar del accidente y le vimos a él y a la moto. Sin duda fue un momento horrible. Deportivamente, mi peor momento fue cuando golpeé contra el árbol. Supe que para nosotros, todo había terminado. Habiamos estado luchando cada día para ganar y lo acabábamos de perder por culpa de un error de pilotaje. Fue un mal momento, pero por el resto estoy muy satisfecho.’
– Aparte de la victoria, ¿cuál ha sido el mejor?
‘La etapa Zouerat Atar. Estuvimos rodando junto a Stéphane y sabíamos que estábamos ampliando nuestro margen con respecto a los Volkswagen. Pilotábamos al máximo y me sentía cómodo siguiendo el ritmo de Stéphane. Hicimos una etapa casi perfecta de no habernos quedado atrapados por un momento en la arena, pero fuimos rápidos.’
– Mitsubishi suma con este seis títulos de consecutivos, ¿cuál crees tu que es el secreto?
‘El punto más fuerte de Mitsubishi es que tiene una muy buena base. El coche es bueno, pero el equipo de gente que trabaja es fantástico. Todo el mundo trabaja en la misma dirección en busca de la victoria y de progresar día tras día. A todo eso hay que sumarle la experiencia que tiene. Mitsubishi está en el Dakar desde hace 24 años, lo que hace que tengan el know how. Cada día en el bivouac, solventando problemas, preparando tácticas, estudiando etapas… El dinero no es la clave del éxito, esa es la gran ventaja de Mitsubishi. Vamos a seguir explotándolo para mejorar el coche y tratar de volver a ganar el año que viene.’
– Hablemos un poco de tus compañeros de equipo. ¿Cómo has visto a Stéphane Peterhansel?
‘Es una referencia para todos nosotros. Es rápido, fuerte, realmente duro de batir, pero ha demostrado también ser humano. Bajo presión, todos podemos cometer errores. Yo también los cometí. Choqué contra un árbol y en las tres etapas mauritanas quedé atrapado en la arena. Hasta ahora era algo raro en el Dakar que los coches de delante quedaran bloqueados tantas veces, pero ahora con la nueva reglamentación con respecto al autoinflado, nos ha pasado a todos. Stéphane y yo somos grandes amigos, pero también estamos luchando con el mismo objetivo que es la victoria. Estoy muy orgulloso de haber estado luchando con él hasta casi el final.’
– Nani Roma.
‘Nani me ha impresionado mucho. Tal vez en las primeras etapas estuvo pilotando más allá de su límite, pero supo compensar y al final lo ha hecho muy bien. Hubo un día en que nos encontramos en la pista y le tuve que adelantar, pero la verdad es que me costó bastante. Se molestó un poco conmigo y me disculpé, pero así son las carreras. Es un tipo fantástico y estoy muy orgulloso de cómo ha mejorado en un año. Estoy seguro que el año que viene estaremos junto luchando por la victoria. Seremos un equipo todavía más fuerte el año que viene.’
– ¿Qué papel ha jugado Dominique Serieys en tu victoria?
‘Siempre hablamos de los pilotos y nos olvidamos del director del equipo. Dominique es una pieza clave en el Repsol Mitsubishi Ralliart Team tanto humanamente como deportivamente. En el aspecto humano, Dominique es una gran persona, alguien que hace que el equipo trabaje al unísono y que estemos unidos. Es evidente que todos queremos ganar y Dominique hace lo mejor para cada uno de nosotros. Las individualidades son complicadas de sobrellevar, pero el equipo siempre hacemos reuniones en las que pasamos bastante tiempo juntos. El objetivo es que trabajemos, tanto física como psicológicamente como con el coche, pero también que estemos unidos y que funcionemos como un equipo. Dominique es, en gran medida, responsable del éxito de Mitsubishi y del mío propio.’
– Ahora ya has ganado el Dakar, ¿cuál será tu próximo reto?
‘Todavía no lo sé, pero no estaría mal cruzar el océano Atlántico en moto de agua.’
– ¿Qué va a hacer Luc Alphand en los próximos días?
‘Mi intención es regresar a Francia. Aún tenemos por delante unos cuantos días de trabajo con la prensa. Un par de días en Lyon y luego iremos París. Después me iré de cabeza a la nieve, a esquiar a Garmish y a trabajar para la televisión francesa para los Juegos Olímpicos de Invierno. Cuando termine, regresaré al trabajo con Mitsubishi para el Rally de Argentina, una semana de descanso y luego hacia Túnez. No hay tiempo para el descanso.’