En la primera curva he cogido el interior y me he tocado con Koyama con el manillar. De hecho no sé si yo le he tocado a él, o él a mí, porque todo ha sucedido muy rápido y casi me caigo. El resultado ha sido que me era imposible tocar el freno delantero, ya que la maneta ha quedado demasiado alta. He intentado ponerla de nuevo bien, pero entonces no podía seguir acelerando al mismo tiempo, y me han adelantado muchos pilotos. Durante la primera vuelta he comprobado que todo estuviera bien y me he podido centrar en recuperar posiciones. Lo he hecho lo mejor que he podido, rodando en los tiempos que hice en entrenamientos con neumáticos que estaban nuevos, así que es positivo. A pesar de todo, hemos seguido teniendo algunos problemas delante, y quiero asegurarme de poder arreglarlo, porque en Motegi se está mucho rato apoyando fuerte en el neumático delantero. No estoy contento con el resultado de hoy, pero sí con la forma en que he pilotado.
