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Dakar 2003. El Circo por dentro. Diario de un equipo

Solo ante el peligro.
Se le está pidiendo mucho a Marc en el que es prácticamente su primer Dakar. Pero, hasta la fecha, lo está haciendo de lujo.

 

Marc se ha quedado solo. Siempre están en la meta Kini y los mecánicos españoles de KTM, Manel, David y Alex. Pero ya no tendrá a Nani ni a Isidre para comentar las dunas del día, el error del road-book o lo bien que lo ha pasado cruzando aquel erg. Están el resto de los pilotos KTM, como Gio (Sala) que es un tío grande, o Fabrizio, lo más expresivo del mundo.Pero faltan Nani e Isidre, y para Marc va a ser duro lo que queda de recorrido sin ellos. Se le está pidiendo mucho a Marc en el que es prácticamente su primer Dakar. Pero, hasta la fecha, lo está haciendo de lujo. Está corriendo con la cabeza, y eso es mucho más de lo que puede esperarse de un novato de 26 años en una carrera tan cruel como el Dakar.

 

Por ejemplo, cuando llegó a su primer erg, se paró a esperar a Gio para seguirle y ver cómo lo hacía él. Para no ser un chuparuedas, lo ayudó a empujar en la arena cuando Gio se quedó enganchado con su pesada bicilíndrica. Ahí se forjó ya un aliado, uno bueno, porque Gio es excepcional. Hoy, por ejemplo, era la primera vez que disputaba una etapa sin GPS la organización los había prohibido para esta jornada-. Pues ha cazado a Brucy y se ha ido con él. Pero también se ha portado bien con él y, cuando el francés se ha perdido, le ha avisado.Y qué decir del maldito día en el que se rompió la punta del eje del cambio. Otro se hubiera quedado tirado. Marc se las ingenió con unos alicates para cambiar a mano y cruzarse todas las dunas en segunda, y hacer todas las pistas en cuarta. Ese día perdió más de una hora. Si no hubiera sido por eso, daría vértigo pensar en qué alturas de la clasificación estaría. Pero, como dice Nani, si queda muy arriba este año, se meterá mucha presión para el que viene.Al terminar la etapa, Marc ido a ver al hospital de campaña a Nani antes de que se llevaran a este último a El Cairo. Han estado bromeando, pero Nani se lo ha dejado claro: Tienes que ir despacio, tienes que terminar. Sería fantástico tener en Sharm El Sheik a Marc.

 

Nani dice que, si pudiera rebobinar su carrera deportiva, tal vez lo mejor hubiera sido pasar desapercibido el primer año y terminar, aunque hubiera sido muy atrás. Dice que él mismo se metió mucha presión poniéndose líder el primer día que pisó Africa. Eso es todo un récord, pero a la larga no le ha venido bien.Todo el mundo lleva esperando que Nani gane esta carrera desde hace ocho años. Pero cuando Meoni llevaba corridos ocho dakares, por ejemplo, todavía nadie contaba con él. La presión le llegó cuando tenía ya toda la experiencia para afrontar esta carrera cruel y bella a partes iguales.

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