Álex Márquez y Stefan Bradl afrontan esta semana el último Gran Premio de la temporada en el Autódromo Internacional do Algarve, Portugal.
Este próximo viernes será la primera vez que Álex Márquez salga a la pista del trazado luso con la Honda RC213V. El piloto español del equipo Repsol Honda no ha competido nunca antes en este circuito, pero sí que realizó un test justo antes del Gran Premio de Francia del pasado mes de octubre. Álex, que pudo completar un día entero de test con la Honda RC213V-S, se mostró satisfecho tanto con el trazado como con el asfalto nuevo, a pesar de mencionar que era una pista un tanto complicada debido a su famosa “montaña rusa” y sus distintos cambios de rasante.
Stefan Bradl sí tiene experiencia en esta pista, ya que en 2017 corrió con la Honda CBR1000RR en el Campeonato del Mundo de Superbikes y, además, realizó dos días de test con la Honda RC213V también antes de viajar a Le Mans. Bradl culminó un test positivo, mostrándose satisfecho tanto con sus tiempos como con el trazado luso.
A priori, las previsiones meteorológicas serán buenas para la celebración del Gran Premio que cerrará esta temporada 2020, tan distinta de las anteriores.
ÁLEX MÁRQUEZ:
“Después de unos días de descanso y recuperación me siento mejor y mi muñeca izquierda cada vez está más fuerte. Portimao es un circuito nuevo para casi todos, así que será interesante ver cómo nos adaptamos y aprendemos. Es una pista muy física con muchas curvas ciegas y creo que la carrera será muy emocionante. ¡Estoy deseando que llegue!”.
STEFAN BRADL:
“Cuando probé la RC213V en Portimao durante el test, era como un circuito completamente nuevo desde que corrí allí antes, el nivel de la moto y también la electrónica en MotoGP lo hace completamente distinto. Tengo muchas ganas de que llegue el fin de semana, es una pista agradable para pilotar y quiero terminar bien la temporada. He estado muy ocupado, especialmente estas últimas tres carreras, pero lo he disfrutado mucho».
