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Los pilotos del equipo Repsol Honda visitan el Centro de Tecnología Repsol, corazón científico de la compañía energética, y experimentan con la tecnología y la innovación presentes en una competición tan exigente como el Mundial de MotoGP.
A una semana del inicio de la temporada, Marc Márquez y Dani Pedrosa han disfrutado de una jornada diferente, rodeados de científicos e investigadores, durante la visita al Centro de Tecnología Repsol, ubicado en Móstoles (Madrid). Márquez y Pedrosa han cambiado por un día sus monos de competición por las batas blancas de investigador, para ejercer de científicos.
Ambos han experimentado con algunos de los elementos de tecnología en los que más se trabaja en la fábrica de Honda en Saitama (Japón) y en el Centro de Tecnología Repsol, para afrontar con garantías una competición como el Mundial de MotoGP: aerodinámica, viscosidad del lubricante y su efecto en el motor, combustión de la gasolina y densidades de líquidos y sólidos, entre otros.
Los investigadores de Repsol han puesto a prueba los conocimientos y habilidades de Marc y Dani, pero no precisamente al manillar de una moto, sino más bien sobre ciencia, en uno de los laboratorios del Centro de Tecnología Repsol, en el que trabajan unas 400 personas y donde se diseña y desarrolla la gasolina y el lubricante que utiliza el equipo Repsol Honda. De esta forma, han comprendido mejor hasta qué punto interviene la ciencia y la tecnología en esta competición y han conocido de primera mano algunos aspectos fundamentales de la moto, los combustibles y los lubricantes que usan en entrenamientos y carreras.
Los combustibles y lubricantes que utilizan los principales equipos patrocinados por Repsol son específicos para cada competición. Si en la moto de Toni Bou se busca la respuesta explosiva desde el ralentí, Dani Pedrosa y Marc Márquez necesitan para sus Honda una gasolina orientada a obtener máximas prestaciones con el menor consumo.
Cambios en 2016
En estos últimos meses se ha hablado mucho de los nuevos neumáticos Michelin y de la centralita única. Sin embargo, la reglamentación de la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) para esta temporada en la categoría reina ha obligado a los expertos del Centro de Tecnología Repsol a buscar nuevas fórmulas para obtener el máximo rendimiento al motor Honda, sabiendo que la capacidad máxima del depósito ha aumentado un litro, pasando de los 21 litros de 2015 a los 22 de 2016, y que se podrán utilizar un máximo de siete motores durante toda la temporada.
Durante la jornada, Marc y Dani también han visitado la unidad de producción de la gasolina de competición, desde donde ya ha salido el carburante rumbo a Catar para el primer Gran Premio de 2016 y se almacena el que se destinará a los otros 17. Para Repsol, la estrecha colaboración con Honda desde hace más de 20 años es un estímulo para desarrollar productos para una competición tan exigente como la categoría reina del Mundial de Motociclismo, que después se ponen al servicio de los consumidores de las más de 4.000 estaciones de servicio de la compañía.
La unión de Repsol y Honda, que operan en sectores distintos y suponen una suma de talentos orientada a la mejora continua, es un ejemplo de colaboración duradera entre dos compañías globales que aspiran a la excelencia y que va más allá del patrocinio deportivo convencional. Se concreta en una estrecha relación entre los laboratorios de Honda en Saitama y el Centro de Tecnología Repsol, dos instalaciones que han sido capaces de aprovechar al máximo sus fortalezas con un objetivo común: ganar el Mundial de MotoGP.
