La República Islámica del África Occidental, Muritaniyah, o más conocida como Mauritania, está situada en el norte del continente africano, en la región del Sahel, entre Senegal y el oeste del Sahara. Está situado en las coordenadas geogárficas de 20º 00′ Norte y 12º 00′ Oeste y su capital es Nouakchott. Con una superficie total de 1,030,700 Km², Mauritania dispone de 5.074 Km de fronteras terrestres. Limita al norte con el Sahara Occidental o Marruecos (con 1.561 Km de frontera), con Mali (2.237 Km) al este y al sur, donde también limita con Senegal (813 Km), al noreste con Argelia (463 Km), y finalmente al oeste con el océano Atlántico (con 754 Km de costas).
Mauritania es fundamentalmente una inmensa llanura sahariana de arena y matorrales. Las dos terceras partes del país, al norte, integran el desierto del Sahara. La mayor parte del terreno lo constituyen un mar de dunas de arena, pero en algunos lugares la tierra se eleva en colinas rocosas con barrancos profundos. El clima tropical y desértico, siempre es seco, caluroso y polvoriento. En el nordeste aparecen las primeras estribaciones de la meseta del Adrar, que en la región central alcanza los 500 metros, y el Tagant en el extremo sur los 600 m, y otras montañas. A lo largo del territorio se esparcen pueblos pequeños y oasis. Hacia el sur, el desierto va dando paso a la sabana del Sahel, con alguna lluvia y vegetación. La hidrografía es pobre y las riberas del río Senegal, en la porción suroccidental del país y que le sirve de frontera sur con la República que le toma el nombre, es la única zona en el país con vegetación permanente y con amplia variedad de fauna. Allí se concentran la población en localidades como Atar, Chinguetti, Tidjikja, Walata o Nema y las actividades productivas, salvo los pastores nómadas, dispersos en todo el territorio. La costa es rectilínea, con numerosas lagunas saladas, en donde las dunas alternan con los acantilados.
Mauritania tiene una población de 2,3 millones de habitantes, con una densidad de población de 2,1 habitantes por Km², una tasa de crecimiento anual del 3% y una esperanza de vida de 51 años. La tasa de natalidad es de 46,92 nacimientos por cada 1.000 personas pero la tasa de mortalidad infantil es de 81,7 fallecidos por cada 1.000 nacidos vivos.
Los idiomas oficiales son el árabe y el francés. Otros idiomas importantes son el Hassaniya de los berebere, el sarakole (de los soninké) y el fulani (de los pulaar) en el sur del país. Es difícil encontrar personas que conozcan el inglés. Aunque en aumento, la población alfabetizada no alcanza el 40% del total. El conglomerado étnico de Mauritania está formado por mezclas de bereberes y negros (40 %), mauriyanos (30 %) y negros (30 %). Sólo las tres cuartas parte de los mauritanos son propiamente «moros», descendientes de los creadores del Imperio Almorávida en la Edad Media. Producto del mestizaje de árabes, bereberes y otros pueblos, moros era el nombre genérico de los pastores nómadas del noroeste de Africa. El 25% restante está formado por pueblos africanos residentes en el sur, de los cuales los más importantes son los pulaar (llamados «toucouleur» por los franceses) y los soninké; también hay minorías uolof y bambara. La religión mayoritaria es la musulmana.
La moneda oficial es la Ouguiya Mauritania que equivale a 0,003 ¬. La mayoría de la población depende de la agricultura y la ganadería para sobrevivir, a pesar que gran número de ellos se refugiaron en las ciudades a raíz de las recurrentes sequías de los años 70 y 80. Subsisten gracias a la ganadería (bovina, ovina, cabría, y de camellos), pues la mayor parte de sus habitantes son pastores nómadas, y la explotación de la palmera datilera y de la goma. Otros productos son el arroz (a orillas del río Senegal), mijo, maíz, tabaco y cacahuetes. La riqueza pesquera de sus costas es de las mayores del mundo, ya que en su mar territorial extendido a 200 millas se pescan sardinas, langostas, bacalao y atún. La sobreexplotación por parte de empresas extranjeras puede amenazar esta fuente de ingresos. También son importantes los productos de la pesca,. Mauritania tiene grandes yacimientos de mineral de hierro que suponen más del 50 % de todas sus exportaciones, aunque la menor demanda internacional, las ha hecho disminuir. También es importante la explotación de otros recursos naturales como el yeso, el cobre, los fosfatos, los diamantes, el oro y el petróleo. El comercio fundamentalmente se basa en la exportación de mineral de hierro, cobre, goma, pieles. La población sedentaria se agrupa en pequeñas poblaciones, al Sur del país. Su renta per per, $1,200. De los 7.496 Km de carreteras que recorren Mauritania, tan sólo 1.342 Km están asfaltados. También dispone de 704 Km de vía ferroviaria, cinco puertos (Bogue, Kaedi, Nouadhibou, Nouakchott, Rosso) y canales para el tráfico marítimo principalmente con el río Senegal. El primer puerto de gran calado del país, en las cercanías de Nouakchott, se inauguró en 1986.
En años recientes, las sequías y la mala administración, han aumentado considerablemente la deuda exterior, que ya ronda los 2 mil millones de dólares, y el gobierno ha iniciado la segunda etapa de su reforma económica de acuerdo con el FMI, el Banco Mundial y algunos países. Las perspectivas de crecimiento a corto plazo no son brillantes por la rémora de la deuda, el rápido crecimiento de la población y la vulnerabilidad a las condiciones climáticas. El PIB es de 2,8 mil millones de dólares.
Mauritania se encuentra en el camino de una de las grandes rutas comerciales transaharianas . El imperio de Ghana, situado en el sureste de la actual Maritania, dominó la región hasta el siglo XII, cuando los almorávides se hicieron con el control del comercio del oro, la sal y los esclavos, lo que les situó como la sociedad dominante hasta su derrocamiento por ejércitos árabes en 1674. El contacto con navegantes europeos fue esporádico y la dominación francesa de la región no se impondría hasta finales del siglo XIX y principios del XX. Fue en 1921 cuando empezó a existir como colonia francesa y en 1958 consiguió su autonomía en asuntos internos, constituyéndose en República dentro de la Comunidad Francesa, creada al instaurarse la V República.
Mauritania obtuvo su independencia de Francia el 28 de noviembre de 1960, actualmente fiesta nacional. El primer partido político en ocupar el gobierno del país fue el Parti du Peuple Mauritanien (PPM), dirigido por Ould Daddah. En 1978, como resultado de la inestabilidad política ocasionada por la guerra por el dominio sobre el Sahara Occidental, los militares se hicieron con el gobierno donde se mantuvieron durante 14 días. En la actualidad, Mauritania se rige por una república en la que la principal figura política del país es Maawiya Sid’Ahmed Taya, que llegó al gobierno tras el golpe militar de 1984 y siendo Jefe de la Guardia Personal del Presidente derrocado, Haidallahque. Una de sus primeras medidas de gobierno fue el reconocimiento de la Región Saharaui y del Frente Polisario como su representante legítimo. En común con muchos otros dictadores africanos, Taya se unió a los vientos de cambios democráticos que propiciados por Francia, se extendieron por otros muchos países, a comienzos de la década de los 90.
Desde la independencia, Mauritania ha buscado fortalecer sus relaciones con los países francófonos del norte de África. Un obstáculo a esta estrategia era la disputa sobre el Sahara Occidental (anteriormente Sahara Español), que fue cedida por España conjuntamente a Marruecos y Mauritania en 1975. La oposición a este plan vino desde el Frente Polisario, quien exigió el reconocimiento del territorio como un país independiente, con el nombre de República Árabe Saharaui Democrática. Sus relaciones con Senegal también han sido difíciles. Una disputa fronteriza entre los dos de países en 1989 provocó el enfrentamiento armado durante varios meses, hasta que la mediación internacional forzó un acuerdo sobre el cese de las hostilidades. La disputa se zanjó y las relaciones diplomáticas se restablecieron a principios de 1992. Desde la promulgación de la nueva Constitución aprobada por referéndum el 12 de julio de 1991, los mauritanos mayores de 18 años eligen al que será su Presidente por un periodo de seis años. Presenta un sistema legislativo bicameral formado por la Asamblea Nacional (de 79 miembros elegidos cada cinco años) y el Senado (de 56 miembros elegidos cada seis años), y un sistema legal triple, constituido por tribunales islámicos (Shari’a), tribunales especiales y tribunales de seguridad del estado (en proceso de ser eliminados).
