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El piloto Repsol analiza con detalle una vuelta al escenario del próximo Gran Premio
El actual Campeón del Mundo de 125cc y vencedor del pasado Gran Premio de Francia de Moto2 analiza el recorrido del Circuit de Catalunya, trazado que conoce a la perfección y que pisó por primera vez en competición con tan sólo 10 años. Fue en la edición del Open RACC 50 de 2003 y desde entonces, Marc Márquez ha vuelto en numerosas ocasiones a una pista que ha sido testimonio de grandes actuaciones del joven piloto. Sin ir más lejos, el año pasado logró alzarse con la victoria en la categoría de 125cc.
Las anteriores visitas como piloto mundialista del pupilo de Emilio Alzamora al circuito de Montmeló también concluyeron con gratos recuerdos para el de Cervera. En la edición de 2008, Márquez consiguió acabar por primera vez entre los diez primeros clasificados. Mientras que en 2009 protagonizó una gran carrera en la que marcó la vuelta rápida de carrera y en la que el podio se le escapó por sólo 26 milésimas.
Caracterizado por la gran cantidad de curvas de distinto radio y velocidad, ángulos con salida ciega y zonas en subida y bajada, el Circuit de Catalunya siempre ha sido uno de los trazados favoritos de los pilotos del Mundial, y el objetivo del piloto Repsol para este fin de semana será el de mantener las buenas sensaciones que le llevaron a conseguir recientemente la victoria en el trazado de Le Mans. Márquez contará con un extra de motivación corriendo a pocos kilómetros de su casa, rodeado del público de su propio país y empujado por sus familiares, amigos y conocidos, que siempre suponen un aliciente añadido.
