Después de proclamarse Campeón del Mundo de Trial Indoor el pasado sábado por cuarto año consecutivo, Toni Bou ha vuelto esta semana a su trabajo en Repsol. Al manillar de su Montesa Cota 4RT, el piloto ha acudido a la oficina como un empleado más de esta compañía.
Pilotando su moto, Bou ha subido en ascensor a la primera planta de la sede de Repsol, situada en el Paseo de la Castellana, y se ha dirigido a su puesto de trabajo sin poner un pie en el suelo. Anteriormente y como cualquier otro empleado de la compañía, Toni ha pasado el control de seguridad con su tarjeta de identificación.
Después de una mañana de duro trabajo, consultando el correo electrónico, haciendo fotocopias y acudiendo a reuniones, Bou se ha tomado un respiro en la máquina de café, y todo ello sin bajarse de su moto durante la jornada laboral.
Finalmente, el Campeón del Mundo ha descendido al patio central de la sede de Repsol por la escalera de emergencia, donde ha recibido el aplauso y las felicitaciones de todos sus compañeros de trabajo por su reciente triunfo. Para agradecerles todo el apoyo recibido, Toni Bou ha realizado una exhibición allí mismo, donde ha superado unos obstáculos con forma de latas de lubricante de tamaño gigante. Ante decenas de empleados de la compañía, Bou ha hecho gala de las dotes que le permitieron el sábado adjudicarse, por cuarta temporada consecutiva, el título mundial de Trial Indoor en Palma de Mallorca.
Toni Bou
“Es una gran satisfacción para mí poder estar aquí, en la sede de Repsol, con las personas que forman parte de esta compañía, y celebrar con ellos este cuarto título mundial indoor. El primero fue muy especial, y los demás han sido muy importantes. Todos ellos son fruto del trabajo y esto significa que ganar nunca es una rutina, sino el premio al esfuerzo; está claro que sin trabajo no se logran éxitos, como bien saben todos mis compañeros aquí en Repsol”.