Marc Márquez se ha proclamado Campeón del Mundo de 125cc en el circuito Ricardo Tormo de la Comunitat Valenciana. El piloto Repsol, que ha protagonizado una temporada soberbia, ha rematado hoy el título en la última cita de la temporada 2010. Márquez, que partía con una ventaja de 17 puntos en la clasificación respecto a Nico Terol y desde la primera posición de parrilla, ha realizado una carrera inteligente y ha finalizado la prueba cuarto.
El pupilo de Emilio Alzamora, Campeón del Mundo de 125cc en 1999 –también con Repsol–, completa de esta forma una temporada histórica para el motociclismo español, después de los títulos conseguidos por Toni Elías (Moto2) y Jorge Lorenzo (MotoGP). Marc Márquez es el protagonista del último éxito en la historia del motociclismo español, que vio en sus orígenes cómo Ángel Nieto lograba en 1971 su primer entorchado en el Mundial de 125cc, también con una Derbi y de la mano de Repsol.
El joven piloto (Cervera, 1993) ha logrado más victorias que nadie en toda la temporada (10) y se ha convertido en el octavo español Campeón del Mundo en la categoría de 125cc. El piloto Repsol ha sumado hoy el decimocuarto título español de la categoría, tomando el relevo de Julián Simón, vencedor la temporada pasada, y ha añadido su nombre a una lista que inauguró Ángel Nieto y en la que también constan Jorge Martínez ‘Aspar’, Álex Crivillé, Emilio Alzamora, Dani Pedrosa y Álvaro Bautista.
Márquez ha conseguido este disputado título con una moto española –Derbi RSA– y con una gasolina y un lubricante desarrollados en exclusiva en el Centro de Tecnología de Repsol (CTR), que se encuentra en Móstoles (Madrid). La compañía energética, que también suministra la gasolina para el Repsol Honda Team de MotoGP, ha puesto a disposición del equipo de Marc Márquez más de 3.000 litros de carburante para cubrir las necesidades de toda la temporada, a razón de unos 150 litros por cada Gran Premio.
Con este título de Marc Márquez, Repsol suma 54 Campeonatos del Mundo en las distintas disciplinas del motor, desde su primera incursión en el mundo de la alta competición, en 1969.