Rodrigo Sperafico regresa al escenario de su última victoria internacional
Angel Burgueño, todavía en proceso de recuperación de la lesión en su hombro, animado por la llegada de un circuito menos bacheado
Tras el paso por el extraño trazado de Curitiba, sumamente rápido y bacheado, los pilotos participantes en esta primera edición de las Telefónica World Series culminan su temporada en el moderno y espectacular circuito de Interlagos. Una pista que alberga pruebas del Mundial de Fórmula 1 y perfectamente adaptada a las necesidades de unos monoplazas que alcanzan elevadas velocidades. El Team Repsol Meycom llega a esta cita final de la temporada con muchas ilusiones puestas en las posibilidades de sus pilotos. Rodrigo Sperafico espera reverdecer laureles alcanzados en este escenario a inicios de temporada, cuando se impuso en la prueba inaugural del Campeonato Internacional de Fórmula 3000. Y su compañero de equipo, Angel Burgueño, ya repuesto de la recaída en su lesión que se produjo en el transcurso de la segunda carrera de Curitiba, sueña también con un final de campaña muy positivo. A diferencia de Curitiba, Interlagos es un trazado moderno, de excelente asfalto y con una pista en perfectas condiciones. Atrás quedaron los enormes baches del escenario de la primera reunión en tierras brasileñas. En Sao Paulo, a buen seguro, se podrá disfrutar con dos excelentes carreras, en las que los dos pilotos del Team Repsol Meycom buscarán poner punto final a la temporada con un resultado acorde a su calidad y posibilidades. Angel Burgueño: Lo pasé muy mal en Curitiba. No me esperaba para nada encontrarme con semejante circuito. Los baches eran horribles y se conducía bajo una gran presión porque los muros estaban muy cerca y no había opción de equivocarse. En semejantes condiciones, mi hombro, que aún no está recuperado al cien por cien, se resintió y me vi obligado a abandonar. Me he estado tratando durante estos días y creo haber recuperado mucho la movilidad. Me encuentro a tope de moral para rendir al máximo en una pista realmente adecuada para este tipo de coches. Rodrigo Sperafico: ¡Ahora o nunca!. Estamos en mi circuito y esta vez no pienso perdonar. Aquí he ganado mi primera gran prueba automovilística y se me presenta una inmejorable ocasión para repetir. Lo de Curitiba es agua pasada. No había estado nunca allí, pese a ser brasileño. Ese circuito no es, precisamente, el más adecuado para estos coches. Pero ahora llegamos a un circuito de Gran Premio, estamos en mi casa, mi coche va perfectamente y todo está dispuesto.